blog - artículos, entrevistas, reportajes y crónica de marta jiménez

Martín Cuenca: “No matemos la cosecha del cine andaluz”


El director almeriense recibe el premio ‘Eloy de la Iglesia’ en Málaga, un festival “clave” en su trayectoria


A Manuel Martín Cuenca siempre se le ha definido como “artesano del cine”, descripción a la que el cineasta, flamante premio Eloy de la Iglesia en esta edición del Festival de Málaga, le añade la de explorador, alguien que intenta “no hacer la misma película siempre” ya que el cine es siempre un viaje en el que “el mapa es el guión”.

Para el almeriense, que se tuvo que ir a Madrid a estudiar cine “para acabar volviendo (a Andalucía)”, la cita malagueña ha sido clave en su carrera porque aquí ganó al mejor documental con ‘El juego de Cuba’ y también aquí presentó ‘Últimos testigos: Carrillo comunista’.

“El festival siempre ha estado ahí, en los momentos importantes de mi carrera”, expresó el realizador lleno de “alegría y prudencia” por los que lo precedieron en el galardón que ha recibido esta noche, cineastas a los que admira como Cesc Gay e Isaki Lacuesta.

Martín Cuenca acaba de terminar el rodaje en Granada de ‘Caníbal’, con Antonio de la Torre, y dice sentirse muy “consciente” del interés que está despertando esta “historia de amor” de un sastre caníbal. El director confiesa su “miedo a las expectativas” que hay ante el film, aunque aclara que ha rodado este película como ”si fuera la última”, que le ha salido desde “las entrañas” y que no “se hincará de rodillas” para buscar al público de la forma más fácil. 

Preguntado por el momento que vive el cine en Andalucía, Martín Cuenca cree que “nunca hemos sido una industria, por desgracia. Hemos fracasado siempre que hemos intentado ser más grandes, pero somos lo que somos”. El director sí cree, sin embargo, que ha habido es una pequeña industria con una gran cantidad de “francotiradores”, como Antonio Pérez con ‘Solas’, por ejemplo. “El momento del cine en Andalucía es especialmente bueno porque proviene de la cosecha de un largo proceso desde hace quince años, donde fueron muy importantes las ayudas de la Junta de Andalucía para provocar el apoyo de Canal Sur y permitir que surgieran productores, técnicos…lo que ha hecho que Alberto Rodroguez, Santi Amodeo, Benito Zambrano hayan crecido”, ha añadido Martín Cuenca.

Pero el realizador de ‘La flaqueza del bolchevique’ y ‘Malas temporadas’ avisa de que “la actualidad continua solo nos hace ver lo que va a pasar de aquí a la semana que viene y la petición sería vivimos en un momento muy bueno del cine andaluz porque proviene de la cosecha de los años anteriores, no matemos esa cosecha”.

Seis mujeres y un canalla, por Mariano Barroso




El director presenta fuera de concurso ‘Todas las mujeres’, con un Eduard Fernández (una vez más) en estado de gracia y con las andaluzas María Morales y Petra Martínez, entre las actrices

¿Por qué una buena película se estrena en Málaga fuera de concurso? ¿Y por qué esa buena película aún cuenta con la incógnita de si llegará a las salas por carecer de quien la distribuya? Las dos preguntas quedaron en el aire tras el pase y la presentación de ‘Todas las mujeres’, la última de Mariano Barroso con un enormeEduard Fernández.

Hubo aplausos tras la proyección y aplausos a la llegada (de parte) del equipo a la sala de prensa. “Muchas gracias por el aplauso, creía que habíamos vuelto a ganar en Málaga”, bromeó Barroso. Él y Fernández ya saborearon el triunfo malagueño con ‘Hormigas en la boca’, en 2005, Premio especial del Jurado y al Mejor Actor entonces. El director volvió a bromear con aquello de que Eduard “está abonado a los premios” y que por eso no compiten, pero nadie supo decir en serio, ni Barroso ni el comité de selección, la causa de que la película no opte a premio en esta edición del Festival.

El actor da vida a Nacho, un donjuan mentiroso compulsivo que emprende una huida hacia delante, incapaz de afrontar sus propios conflictos. Para el director, la película habla “del deporte nacional, echarle la culpa a otro de lo que te pasa ti”. El espectador se acerca al protagonista a través del retrato “poliédrico” que del personaje hacen seis mujeres: exnovias, madre o psicóloga. Para el actor, el presonaje es “un miserable entrañable” que entronca con la picaresca española y “el pijoaparte” que creó Marsé. Para Barroso, lo humano del personaje “te desarma lo moral” y, por último, según una de las actrices del film, Nathalie Poza, “detrás de cualquier canalla hay un ser frágil lleno de carencias afectivas”.

Con ‘Todas las mujeres’ el espectador ríe y se conmueve gracias a “esa fuerza de la naturaleza” en palabras de Barroso que es Eduard Fernández, un actor y una interpretación con el que todos su compañeros, prensa incluída, se han desecho en elogios. La rueda de prensa del film ha acabado convertida en un cinefórum en el que Poza también ha cargado contra las chicas: “hay cosas que nos tenemos que mirar, como ésto de intentar salvar a los demás, algo que les pasa a muchas”. Las otras actrices del film son Michelle Jenner, Marta Larrald
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Macarena Gómez: “Muchos de los grandes actores de este país son andaluces”

La actriz cordobesa estrena en Zonacine del Festival malagueño el capítulo dirigido por Pablo Vara de ‘Al final todos mueren’
Foto: Carles Congost 

Esta es la historia de una actriz cordobesa que ha trabajado muy poco en Andalucía. Tan poco, que muchos ni siquiera saben que es andaluza pese a que uno de sus primeros papeles fue en aquella cantera de actores llamada ‘Padre coraje’. Una serie de Benito Zambrano en la que hacía de yonki, la Susi, un personaje que le encanta recordar.

Su teoría sobre que no la llamen de su tierra para ofrecerle papeles es se ha prodigado poco por su tierra. Estudió interpretación en Londres, después se fue a vivir a Madrid y tampoco ayuda mucho su alejada pinta de la mujer cordobesa. Aunque nadie lo diría viéndola caracterizada como La Chiquita Piconera (mujer pintada por Julio Romero de Torres), tal y como la fotografió Manuel Outumuro, un personaje al que le encantaría encarnar en la pantalla.

Esta musa del cortometraje que adora los personajes de época y que triunfa en televisión como Lola Trujillo en ‘La que se avecina’, llega a Málaga en la troupe de una película de bajo presupuesto, ‘Al final todos mueren’, que une a cinco directores -Javier Botet, Javier Fesser, David Galán Galindo, Roberto Pérez Toledo y Pablo Vara- en cuatro episodios donde el fin del mundo llega según sus diferentes maneras de entender el cine.


Macarena Gómez participa...

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¿Córdoba te quiere?

Esta es la historia de una película turística diseñada para recibir a los visitantes que llegan a Córdoba. Pero una cosa es para qué se crea un producto audiovisual y otra la triste realidad. ‘Córdoba, vida y genio’ es el nombre de un documental preciosista sobre la provincia, rodado en 3D, dirigido por Hervé Tirmarché y sembrado durante la carrera por la Capitalidad (Tirmarché era amigo de Carlota Álvarez Basso). Pero como el corto aun no posee la función que se le encomendó, ha sido pasto de la “movilidad exterior” y, al menos, se ha llevado un premio en el Festival de Cine Internacional de Turismo de Riga, ciudad que siempre me sonará a Eurovisión.

¿Y por qué los turistas no pueden ver este bonito documental 3D como entrada a su visita a la ciudad? Porque aún está cerrado el lugar donde debe proyectarse, el Centro de Recepción de Visitantes, junto a la Puerta del Puente, que casi un año después de su entrega aun está falto de mobiliario. Ustedes dirán, ay la crisis, pero parece que la verdadera causa está en la guerra fría interinstitucional, ya que el edificio lo hicieron los unos pero el
mobiliario depende de los otros. Aparte, planea la privatización de la gestión del Centro por parte del Consorcio, que siempre me sonó a Mocedades.
Las imágenes del documental se acompañan del ‘Nocturno de Córdoba’ con la Orquesta y Javier Riba, el cante de El pele o la guitarra de Vicente Amigo y son, claro que sí, espectaculares. La provincia brilla con su patrimonio artístico y natural, para variar, con planos de Cardeña-Montoro, Zuheros o Almedinilla. Pero a la Mezquita se la llama “Catedral, antigua Mezquita” -¿hasta aquí llegan los tentáculos del Cabildo?- y es nula la presencia de lo contemporáneo con la excepción de una bailaora ante una obra de Juan Serrano en Orive. Porque pasear en Vespa alrededor de la Mezquita creo que ya no es moderno. Así que si el centro por abrir refleja la unión entre la arquitectura nueva y la tradicional su contenido, al menos éste, lo desune. Así que le preguntaría al turista en un hipotético Centro de Despedida de Visitantes, “¿en serio crees que Córdoba te quiere?”.