En realidad Javier es un mirlo blanco en el cine y en esta ciudad
¿Saben cuántos directores españoles hay ahora mismo involucrados en una superproducción de Hollywood? Me sobran muchísimos dedos para contarlos. Uno de ellos es cordobés, se llama F. Javier Gutiérrez y acaparó la atención del mundo en 2008 con una película post-apocalíptica y multipremiada llamada ‘3 días’. Un superproductor de Hollywood se fijó en su sello personal en el género fantástico y Javier decidió abandonar la comodidad de su ciudad, además de un proyecto en España con Antonio Banderas, para volar a Los Ángeles.
Cuatro años después de su llegada a la costa oeste dirigirá ‘El cuervo’ (‘The Crow’), una nueva versión del cómic de James O’Barr sobre la resurrección de un músico rock de la mano de un pájaro místico para vengar su muerte y la de su prometida. Una historia que ya tuvo una mítica versión cinematográfica en 1994 con maldición incluida: la muerte de Brandon Lee en pleno rodaje durante una escena de tiroteo. Javier vio aquella película en video, alquilado en Fuentes Guerra, cuando soñaba con ser director y rodar algún día en Hollywood. Quien le iba a decir entonces que dirigiría un megaproyecto con 60 millones de dólares de presupuesto, algo menos que el que tenía el fallido Palacio del Sur. Lo que es la vida.
El rodaje comenzará cuando la agenda de su estrella protagonista –Luke Evans, actor en ‘Fast & Furious 6’ o ‘El Hobbit’- lo permita. Después, quiere volver a rodar en España porque igual que fue listo para marcharse, lo será para volver a una tierra que permite mayor libertad creativa a los cineastas y en donde las ciudades poseen la escala humana de la caña y la tapa aunque sean más aburridas. Antes, lo veremos brillar en los luminosos de los cines locales y mundiales. En realidad, Javier es un mirlo blanco en el cine y en esta ciudad. Nuestro Bardem. O nuestra Penélope. Aunque casi nadie lo sepa.