Flores enviadas desde Japón, el lugar donde nació en la ciudad de Imba gun, cerca de Tokio, en 1943. Música japonesa, amigos, diversos y muchos, y lágrimas. Estos fueron los elementos del paisaje para el último adiós a la artista cordobesa Hisae Yanase, celebrado con un acto laico en el Tanatorio de Las Quemadas.
Otro artista, Jacinto Lara, fuertemente inspirado en la vida y en el arte por Hisae, ofició una ceremonia tan sencilla como lo fue su protagonista. “Ella es parte de mi tribu”, afirmó contando que solía llamarla “la jefa” por todo lo que le enseñó. La mayor de esas enseñanzas, reveló, fue una sentencia: “Si tienes un problema y no lo puedes resolver, ¿de qué te quejas?. Y si lo puedes resolver, ¿de qué te quejas?”.